De acuerdo con información oficial, el cuerpo de la funcionaria judicial fue encontrado en su apartamento, ubicado en el barrio Ceiba II de la capital de Norte de Santander. El hallazgo se produjo luego de que su esquema de seguridad alertara a la Policía, al llegar al edificio para cumplir con su acompañamiento habitual y no obtener respuesta tras insistir durante varios minutos en la puerta del inmueble.
Una vez los uniformados lograron ingresar al apartamento, encontraron el cuerpo de la jueza en su habitación. Junto a ella estaba su hijo, un bebé de apenas dos meses de nacido, quien fue hallado con vida. El menor fue trasladado de manera inmediata a una clínica privada de la ciudad, donde permanece bajo observación médica, debido a que aún no se ha podido establecer con precisión cuánto tiempo permaneció solo junto al cuerpo de su madre, según informó una emisora local.
Mientras avanzan las investigaciones para esclarecer las circunstancias del fallecimiento, las autoridades manejan como hipótesis preliminar un posible suicidio. No obstante, han sido enfáticas en señalar que será Medicina Legal la entidad encargada de determinar con exactitud la causa de la muerte. Hasta el momento, no se ha emitido un pronunciamiento oficial que confirme dicha versión.
En medio del impacto por la noticia, tomó especial relevancia la última publicación que Vivian Polanía realizó en sus redes sociales. La imagen, compartida el pasado 18 de julio, semanas antes de dar a luz, mostraba una ecografía del bebé que esperaba. En el breve y emotivo mensaje que acompañó la publicación, la jueza escribió: “Te amo, Mohammed”, nombre que posteriormente le dio a su hijo.
Lo que en su momento fue visto como una expresión de ilusión y esperanza por la maternidad, hoy se convierte en un elemento que profundiza la consternación y abre múltiples interrogantes sobre los motivos de su deceso, al evidenciar que la funcionaria no pudo disfrutar plenamente de su reciente maternidad.
Vivian Polanía se desempeñaba como jueza de control de garantías y contaba con una amplia trayectoria dentro de la Rama Judicial, en la que ocupó distintos cargos a lo largo de su carrera. En los últimos años, su nombre alcanzó notoriedad a nivel nacional por varias decisiones judiciales polémicas y por controversias relacionadas con el manejo de sus redes sociales, situaciones que derivaron en procesos disciplinarios y la mantuvieron bajo el foco mediático.
Uno de los casos más relevantes en Norte de Santander fue asumido por Polanía en su calidad de jueza primera penal municipal con función de control de garantías ambulante de Cúcuta, cuando ordenó enviar a prisión a Alejandro José Arias Alejos, señalado como presunto responsable del asesinato del abogado y veedor ciudadano Jaime Alonso Vásquez Giraldo.
Arias Alejos, conocido con los alias de ‘Chueco’, ‘Cojo’ o ‘Pure’, fue imputado en abril de 2024 por los delitos de coautoría en homicidio agravado, porte ilegal de armas y concierto para delinquir. Aunque el procesado no se allanó a los cargos, la jueza consideró que el material probatorio presentado por la Fiscalía era contundente y avaló la solicitud de medida de aseguramiento en centro carcelario.
Durante la audiencia, Polanía sostuvo que el imputado representaba un peligro para la sociedad y que existía riesgo de no comparecencia al proceso judicial. Además, ordenó su reclusión en una cárcel de máxima seguridad y bajo estrictas medidas de protección, al advertir un presunto plan para asesinarlo por parte de la estructura criminal ‘Los AK47’, organización a la que, según la Fiscalía, pertenecería como segundo cabecilla.
La jueza también rechazó los argumentos de la defensa y exhortó al ente investigador a avanzar en la identificación de los autores intelectuales del crimen, basándose en pruebas técnicas y no en versiones sin sustento.
Cabe recordar que, en el marco de ese proceso, se abrió una investigación contra el gobernador de Norte de Santander, William Villamizar, por algunos señalamientos realizados por Arias Alejos, en los que también fue mencionado el alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo.
Tras el hallazgo del cuerpo, las autoridades médico-legales se retiraron inicialmente del lugar para no alterar la escena, a la espera de personal especializado de la Fiscalía y de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho). La zona fue acordonada y se realizaron la inspección técnica y el levantamiento del cadáver.
De estas diligencias preliminares se conoció un dato relevante: no se encontraron señales visibles de violencia en el cuerpo de la jueza. En los alrededores del inmueble tampoco se hallaron indicios que permitieran establecer de manera inmediata lo ocurrido.
Finalmente, el cuerpo fue trasladado a las instalaciones de Medicina Legal, donde se practicará una necropsia exhaustiva que permitirá determinar la causa exacta de la muerte. Mientras tanto, el país permanece a la expectativa de los resultados oficiales, en medio del dolor, la incertidumbre y las múltiples preguntas que rodean el fallecimiento de la jueza Vivian Polanía.
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