Con una nueva correlación de fuerzas en Senado y Cámara, el Ejecutivo buscará concretar sus reformas clave antes del 20 de junio. La salud, el sometimiento de bandas criminales, una nueva reforma tributaria y los ajustes al sistema tarifario eléctrico estarán en el centro del debate.
Con la instalación de las nuevas mesas directivas en el Congreso de la República, se dio apertura a la cuarta y última legislatura del actual periodo constitucional. Un nuevo ciclo legislativo que no solo marca el inicio de una carrera contra el reloj para el Gobierno del presidente Gustavo Petro, sino que confirma el ambiente de tensión y disputa con el Legislativo.
Como ha sido costumbre en las tres legislaturas anteriores, la Casa de Nariño intentará concentrar las discusiones en torno a sus proyectos estratégicos, razón por la cual ya inició un barrido interno de fuerzas políticas en Senado y Cámara, evaluando su capacidad de incidencia y gobernabilidad.
Reforma a la salud, prioridad máxima
La gran apuesta del Gobierno vuelve a ser la reforma a la salud, el único proyecto estructural del llamado paquete de reformas sociales que aún no ha sido aprobado. Mientras las reformas laboral y pensional lograron avanzar, no sin polémica, la de salud sigue pendiente de dos debates en el Senado, donde enfrenta resistencias incluso dentro de las bancadas aliadas.
El presidente Petro ha insistido en que el eje de la reforma es un modelo de atención preventiva, el cual ya ha comenzado a implementarse de forma parcial, pero requiere del respaldo legislativo para operar plenamente. En ese contexto, el Ejecutivo jugará parte de su capital político, enfrentando un duro pulso con las EPS y sectores críticos del sistema actual.
Paz total: nuevo marco para el sometimiento
El segundo gran proyecto del Ejecutivo es la ley de paz total para el sometimiento de estructuras criminales, presentada por el ministro de Justicia, Eduardo Montealegre. Esta iniciativa busca ofrecer beneficios jurídicos condicionados a miembros de organizaciones sin estatus político —como bandas criminales urbanas y rurales—, siempre y cuando entreguen bienes, contribuyan a la verdad, reparen a las víctimas y cesen toda actividad ilegal.
Esta nueva normativa busca dar un giro estratégico a la política de seguridad, promoviendo el desmantelamiento negociado de redes del crimen organizado y ampliando los alcances de la Ley 2272 de 2022.
Reforma tributaria: la más polémica
Uno de los anuncios que ya genera resistencia es el de una nueva reforma tributaria, con la que el Gobierno busca recaudar alrededor de 26 billones de pesos. El ministro de Hacienda, Germán Ávila, ha justificado la medida como necesaria para garantizar estabilidad fiscal e inversión pública, pero las bancadas opositoras advierten sobre el impacto que puede tener en medio del ambiente electoral.
El presidente Petro ha afirmado que esta tributaria estará dirigida a los “mega ricos” del país, aunque sectores empresariales advierten sobre eventuales efectos en la inversión privada y el crecimiento económico.
Transferencias territoriales y energía
El Congreso también deberá abordar la ley de competencias, pieza clave para la transformación del modelo de transferencias de recursos hacia las regiones. Este trámite, liderado por el ministro del Interior, Armando Benedetti, busca redefinir las reglas fiscales para fortalecer la autonomía territorial.
En paralelo, el Gobierno pretende radicar un proyecto para fijar una nueva ley de tarifas de energía, que modificaría el esquema de subsidios. La propuesta contempla que los saldos pendientes de la opción tarifaria para estratos 1, 2 y 3 sean asumidos por usuarios de mayor capacidad económica (estratos 4 a 6 y sector comercial), al tiempo que se reformaría la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG).
Otros temas en el radar
Aunque estas cinco iniciativas concentran la atención, el Ejecutivo y las bancadas esperan tramitar también otros proyectos como la jurisdicción agraria, la reforma al Icetex, la prohibición del fracking, una ley de cultura renovada y normas que fortalezcan los derechos laborales.
En suma, la legislatura que va hasta el 20 de junio de 2026 se proyecta como la más decisiva del Gobierno Petro. Con un ambiente político fragmentado, una correlación de fuerzas aún inestable y un país polarizado, el reto será lograr consensos y evitar que las tensiones entre poderes terminen bloqueando las transformaciones estructurales que plantea el Ejecutivo.
1 Comentarios
Esta última legislatura es bastante importante y decisiva para el gobierno Petro pero la oposición de derechas no puede seguir bloqueando en definitiva las reformas y las acciones del gobierno solo por cálculos políticos. Por otro lado usted me tiene olvidado. O son sus temas personales o algunas cosas de la carta que escribí no le gustaron o por cualquier otra cosa y de verdad se hace menos si se desentiende de todo. Gracias
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