Amnistía Internacional denunció que el hambre está siendo utilizada deliberadamente como arma de guerra y calificó la situación como parte de un “genocidio en curso” contra la población palestina. La organización publicó nuevos testimonios de civiles desplazados que describen escenas de desesperación y muerte.
“Vi con mis propios ojos a gente que llevaba sacos de harina manchados con la sangre de quienes acababan de ser tiroteados. La experiencia del hambre y la guerra ha cambiado totalmente Gaza”, relató Nahed, de 66 años, a Amnistía Internacional.
La Clasificación Integrada en Fases de la Seguridad Alimentaria (IPC) ya había advertido en julio que se habían alcanzado los umbrales de hambruna en gran parte del territorio, con un aumento alarmante de muertes por inanición, especialmente entre niños, niñas, personas con discapacidad, mujeres embarazadas y lactantes.
Amnistía Internacional señaló que las restricciones israelíes a la entrada de alimentos, medicinas y combustible han llevado a la población civil al borde de la inanición, mientras que embarcaciones con ayuda humanitaria han sido interceptadas por fuerzas navales israelíes antes de llegar a Gaza.
La organización recordó que la Corte Internacional de Justicia ha ordenado en repetidas ocasiones a Israel permitir el flujo sin trabas de ayuda humanitaria y garantizar la supervivencia de la población civil, como potencia ocupante. Sin embargo, las órdenes no se han cumplido.
“La historia nunca nos perdonará por quedarnos de brazos cruzados mientras mueren niños y niñas hambrientos”, advirtió Amnistía Internacional, que pidió a los Estados actuar de inmediato para poner fin al bloqueo y al “genocidio en curso” contra la población palestina.
La organización llamó a la comunidad internacional a presionar a Israel para levantar de inmediato el bloqueo de Gaza y permitir el acceso seguro y digno de ayuda humanitaria, como paso urgente para detener la crisis.
Tomado de: Amnistía Internacional – Equipo de Israel y el Territorio Palestino Ocupado
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